En una de las presentaciones más simbólicas de su carrera, Danny Ocean llevó el alma de Venezuela al escenario del Premio Nobel de la Paz 2025, inaugurando la ceremonia en Oslo con una interpretación íntima y profundamente emotiva de “Alma Llanera”.

La presentación se llevó a cabo este 10 de diciembre en el icónico Ayuntamiento de Oslo, donde Ocean apareció acompañado únicamente por el pianista estadounidense Curtis Crump Jr.. Juntos, ofrecieron una versión delicada, nostálgica y respetuosa del tema que muchos consideran el segundo himno de Venezuela.

La ceremonia tiene este año un significado especial tras la selección de María Corina Machado como ganadora del Premio Nobel de la Paz 2025, reconocimiento que destaca su labor en la defensa de los derechos democráticos y su lucha por una transición pacífica en Venezuela.

Aunque Machado no pudo asistir por razones de seguridad, su presencia simbólica atravesó el evento, y el homenaje musical de Ocean actuó como un puente emocional entre ella, su país y los miles de venezolanos que siguen el momento desde el exilio.

Un tributo cargado de identidad

Ocean no solo interpretó “Alma Llanera”, sino que también ofreció una elegante versión de “Venezuela”, otra de las piezas más queridas por la comunidad. Con su tono ronco y melancólico, transmitió un sentimiento colectivo: el anhelo, la nostalgia y la esperanza de millones de compatriotas.

“Gracias, Madre María Corina Machado, por darme este momento”, escribió más tarde en redes sociales. “Es el mayor honor cantar dos canciones tan simbólicas para nuestro país”. El mensaje fue acompañado de una reflexión sobre la lucha, el valor y la esperanza de un pueblo que vive una de las crisis más profundas de su historia reciente.

Para Ocean, cuya carrera internacional ha estado marcada por la conexión emocional con su país, este momento representa un punto de inflexión: un espacio ganado para la cultura venezolana en uno de los escenarios más prestigiosos del mundo.

El homenaje abrió la ceremonia antes de los discursos oficiales del Comité Nobel y los segmentos protocolares. Sin embargo, quedó claro que la actuación del venezolano será recordada como uno de los momentos más poderosos de esta edición.

El Premio Nobel de la Paz 2025 no solo reconoce a una figura política, eleva la historia de un país entero, y Danny Ocean se encargó de que Venezuela sonara fuerte, clara y profundamente humana en el corazón de Noruega.

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